Pedrero y Graña

Otro oro mundial a golpe de remo

06/09/2019 · Por Iñigo Esteban
Pedrero y Graña piragüismo apertura
Alberto Pedrero y Pablo Graña se subieron al cajón más alto del pódium en el Mundial de Hungría. ©RFEP

Si algo ha quedado claro tras el Mundial de Hungría es que el piragüismo español goza de una salud de hierro. Al frente del medallero, el oro logrado por Alberto Pedrero y Pablo Graña, que se han proclamado campeones del mundo en la categoría C2 200. A esta presea hay que sumar tres platas, tres bronces y cuatro billetes para los JJ.OO.

En los últimos años son muchos los trofeos que han ido llegando a golpe de remo hasta las vitrinas españolas. En diferentes momentos y categorías, David Cal y Saúl Craviotto han hecho del piragüismo una mina de lo más prolífica para nuestro deporte. Parece que también han creado cantera, pues comienzan a despuntar nuevas figuras de la canoa. Así lo confirman los jóvenes Alberto Pedrero y Pablo Graña, con su medalla de oro en el Mundial de Hungría: “Estamos en estado de shock. Sentimos mucha alegría al darnos cuenta de lo que hemos conseguido”, señala Pedrero.

La pareja Pedrero-Graña se hizo adulta sobre las aguas de Szeged y confirmó las grandes expectativas que habían generado. Hugo Alberto Pedrero (Madrid, 1995) y Pablo Graña (Cangas, 1999) se impusieron por 12 centésimas a la embarcación polaca en la categoría C2 200, descolgándose el cartel de nuevas promesas con el que llegaban al Mundial de Hungría, celebrado entre el 23 y el 25 de agosto. Tras ser ambos subcampeones del mundo, por separado, en categoría sub-23, se juntaron el pasado mes de mayo y han encajado de maravilla. “Empezamos a entrenar juntos tan solo tres semanas antes del Mundial, pero desde el primer día hemos ido bastante acoplados”, Pedrero. “Después de todo el trabajo realizado, no podría haber salido mejor”, puntualiza Graña.

El punto amargo del éxito de Pedrero y Graña es que su categoría no será una de las que estén presentes en los JJ.OO. de Tokio. La especialidad de ambos palistas son las regatas al esprint que, desgraciadamente para el deporte español, no forman parte del programa de los Juegos. Graña, salido de la inagotable fábrica gallega, se resigna señalando que “es una pena, pero es lo que hay”. Idéntica situación a la de Toni Segura y Sete Benavides, quienes se traen un meritorio bronce de Hungría en la modalidad C2 500, pero que tampoco podrán reeditar en la capital japonesa el próximo verano.

Un botín de siete medallas y cuatro clasificaciones para Tokio

El oro obtenido por el dúo Pedrero-Graña no ha sido el único metal que se trajeron de vuelta los piragüistas españoles. El equipo de K4 500, la embarcación más mediática capitaneada por Saúl Craviotto y en la que también estaban Carlos Arévalo, Marcus Cooper Walz y Rodrigo Germade, logró el subcampeonato en su categoría, al igual que el K2 1000 de Paco Cubelos e Íñigo Peña y el K2 500 de Pelayo Roza y Pedro Llenín. Por su parte, otros tres bronces han volado desde Hungría a España gracias a Carlos Garrote y Teresa Portela, ambos en K1 200, y al ya citado dúo formado por Toni Segura y Sete Benavides en C2 500. Un total de siete medallas que hacen que ya contemos con cuatro canoas clasificadas para disputar los JJ.OO. del próximo verano en Tokio.  

Nuria Vilarrubla renace con un oro mundial en eslalon

La exitosa corriente del piragüismo español no deja de traer trofeos. En esta ocasión, Nuria Vilarrubla ha sumado un nuevo oro al medallero nacional en la categoría C1 en la Copa del Mundo de eslalon celebrada en Markkleeberg, Alemania, entre el 30 de agosto y el 1 de septiembre. La palista catalana se impuso a sus rivales con una última bajada perfecta y volvió a ganar una prueba dos años después de su anterior victoria. Vilarrubla, al concluir la competición, hizo hincapié en que “ahora me siento con mucha más confianza, tras volver a saborear las mieles del éxito, y, mirando al futuro, añadió que “me encantaría ir a los Juegos. Sueño con ello, pero todavía hay un largo camino por recorrer”. Desgraciadamente, otras figuras del remo como Maialen Chorraut (doble medallista en Londres 2012 y Río 2016) y Ander Elosegi (diploma olímpico) no pudieron engrosar el palmarés del piragüismo español, ya que quedaron séptima y noveno en sus pruebas de K1 y C1 respectivamente.